miércoles, 6 de marzo de 2013

"Dicen los diarios buenos"; Ferrero, Mónica



Dicen los diarios
buenos de Caracas
que, esta vez, sí
te has muerto,
Compañero Comandante,
Chávez Frías.
Bajo los puñales
de tinta triste
y fría
de los titulares,
ruedan lágrimas
gruesas
como bolívares
de oro
por las mejillas
pardas, negras
y cobrizas
de toda la América
Latina.
Los pulmones del Caribe
escupen una sangre
altiva
de petróleo
para las necrológicas
últimas del hambre
en los bohíos
donde el pan
huele a humo
de látigo
y boñiga.
Desde que no estás
no salta más el Ángel,
sino que se acoquina
en el regazo
pétreo
del Auyantepuy
como un cachorro
sin guarida.
Cómo vas a morirte
así
de puro cáncer
para darle el gusto
a los buitres
cebados
de manuales
de empréstito
y mentira;
a los negreros
de estandarte
de dólar y cruzadas tibias;
a los señoritingos
que ejecutan himnos
de alabanza
a Tí, Kyrie,
rastrero y gringo,
en sus clarines
de cacerolas finas;
a las mujerzuelas
que oxidan motas
y tapan con Chanel nº 5
sus raudales
de ritmo
y de catinga
para cónsules
de coima
y sacristía.
Cómo vas a dejar
así el mar nuestro
con sus bahías
de aceites y corales,
con sus piélagos
de aduanas arrancadas
a las carabelas asesinas,
con sus sirenas
de pechos
de fajina,
con sus tiburones
de leche y miel
burlando arpones
de invasión y regalía?
Ay, Compañero Comandante,
en esta América
mestiza
lloramos en tu nombre
una pena larga,
muy larga,
tan larga
como la cadena
de siglos de horror
y avemarías.

 Mónica Ferrero (Córdoba, Argentina.- 5 de marzo de 2013)

No hay comentarios:

Publicar un comentario